Unos 40 cazadores han sido judicializados entre el 2016 y 2023, según datos del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), en Panamá Oeste, luego de ser aprehendido llevando consigo armas de fuego y el producto de la caza.
Zuleika Toribio, directora de Áreas Protegidas y Biodiversidad en esta provincia, indicó que la destrucción de las jaulas trampas se realizó luego de concluido los procesos administrativos.
Todas las jaulas fueron enterradas en una zona preseleccionada dentro de terrenos de los polígonos de tiro de Nuevo Emperador y Balboa Oeste.
La vigilancia de los guarda parques y la Policía Ecológica ha sido redoblada dentro de esta zona protegida, especialmente en las rutas que frecuentan los cazadores furtivos.
La funcionaria recomendó a la población no comprar ni consumir carne de animales selváticos, dado que ello implica convertirse en cómplice de un delito ambiental.